Ante las versiones de ciertos operadores del gobierno y de las mineras sobre actos violentos y destructivos, con los que ni nosotros, ni nuestras organizaciones sociales, tenemos nada que ver -hoy han amanecido camionetas destruidas e incendiadas en las inmediaciones de nuestra provincia-, es necesario decirle al país, que se está llegando a algo grave.
En efecto, estamos yendo a las tácticas de épocas del fujimontesinismo, que pensábamos ya estaban sepultadas para siempre, donde a los que luchaban justamente por nuestros derechos y recursos naturales se les sembraba pruebas para acusarlos de terroristas y violentistas, para poder encarcelarlos, y se usaba psicosociales para buscar la sin razón y militarizar la sociedad y así poder salirse con sus cometidos.
Hoy las mineras, sobre todo Yanacocha-Conga, y el gobierno, al no tener argumentos para poder imponer el megaproyecto minero Conga. ahora intentan desprestigiar nuestra lucha justa e inteligente en defensa de nuestra agua, de nuestras lagunas, provocándonos, responsabilizándonos a toda costa de los actos violentos orquestados por esas empresas, en complicidad con el gobierno, pero no vamos a caer en esos actos mal intencionados.
¿Qué intenta Yanacocha-Conga con estas operaciones y psicosociales?
Para recordarm algunas informaciones que se difundieron mal intencionadamente:
Primer acto: el 16 de enero, durante nuestra jornada de resguardo e inspección de nuestras lagunas, dijeron “que habíamos quemado una caseta de seguridad de la mina y una antena”.
Segunda acto: el día 19 de febrero, cuando realizábamos nuestra jornada de resguardo e inspección de nuestras lagunas Negra y Seca, dijeron, al tiempo que nos acusaban de terroristas, que habíamos “intentado derribar postes de alta tensión de energía eléctrica”, pero que en el lugar indicado no había ni una de esas torres.
Finalmente dijeron que “habían banderas subversivas en algunas zonas cerca al megaproyecto minero Conga”, y ahora salen con la “quema y destrucción de camionetas”.
Hay un común denominador: desprestigiar nuestra lucha y acusarnos de algo que no hemos cometido ni vamos a cometer nunca.
Entonces, ahora, ¿que sigue? ¿Militarizar la zona? ¿Encarcelarnos a los dirigentes? ¿Declararnos terroristas? Creo que se está llegando al extremo en estas operaciones y psicosociales que faltan el respeto a nuestras organizaciones sociales y a nuestra lucha.
Pero siempre la razón y la verdad sale a la luz, así es que estamos tranquilos, nuestra lucha es justa, inteligente, y la continuaremos hasta asegurarnos que nuestras lagunas cerros y bofedales estén a salvo.
En efecto, estamos yendo a las tácticas de épocas del fujimontesinismo, que pensábamos ya estaban sepultadas para siempre, donde a los que luchaban justamente por nuestros derechos y recursos naturales se les sembraba pruebas para acusarlos de terroristas y violentistas, para poder encarcelarlos, y se usaba psicosociales para buscar la sin razón y militarizar la sociedad y así poder salirse con sus cometidos.
Hoy las mineras, sobre todo Yanacocha-Conga, y el gobierno, al no tener argumentos para poder imponer el megaproyecto minero Conga. ahora intentan desprestigiar nuestra lucha justa e inteligente en defensa de nuestra agua, de nuestras lagunas, provocándonos, responsabilizándonos a toda costa de los actos violentos orquestados por esas empresas, en complicidad con el gobierno, pero no vamos a caer en esos actos mal intencionados.
¿Qué intenta Yanacocha-Conga con estas operaciones y psicosociales?
Para recordarm algunas informaciones que se difundieron mal intencionadamente:
Primer acto: el 16 de enero, durante nuestra jornada de resguardo e inspección de nuestras lagunas, dijeron “que habíamos quemado una caseta de seguridad de la mina y una antena”.
Segunda acto: el día 19 de febrero, cuando realizábamos nuestra jornada de resguardo e inspección de nuestras lagunas Negra y Seca, dijeron, al tiempo que nos acusaban de terroristas, que habíamos “intentado derribar postes de alta tensión de energía eléctrica”, pero que en el lugar indicado no había ni una de esas torres.
Finalmente dijeron que “habían banderas subversivas en algunas zonas cerca al megaproyecto minero Conga”, y ahora salen con la “quema y destrucción de camionetas”.
Hay un común denominador: desprestigiar nuestra lucha y acusarnos de algo que no hemos cometido ni vamos a cometer nunca.
Entonces, ahora, ¿que sigue? ¿Militarizar la zona? ¿Encarcelarnos a los dirigentes? ¿Declararnos terroristas? Creo que se está llegando al extremo en estas operaciones y psicosociales que faltan el respeto a nuestras organizaciones sociales y a nuestra lucha.
Pero siempre la razón y la verdad sale a la luz, así es que estamos tranquilos, nuestra lucha es justa, inteligente, y la continuaremos hasta asegurarnos que nuestras lagunas cerros y bofedales estén a salvo.
Edy Benavides
Dirigente del Frente de Defensa de Hualgayoc-Bambamarca.
Dirigente del Frente de Defensa de Hualgayoc-Bambamarca.
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